Antoine, tras ser expulsado del ejército por insubordinación, visita a su antigua novia, Christine cuyo padre le encuentra a Antoine un trabajo temporal como vigilante nocturno de un hotel. Sin embargo, por culpa de un detective privado, pierde el empleo el primer día. Para compensarlo, el detective le ofrece trabajo en su agencia. Después de encargarse de asuntos menores, recibe una misión a desarrollar en una zapatería, en la que Antoine conoce a Fabienne, la esposa del propietario.
Besos robados es una de las películas más icónicas de François Truffaut, continuadora de la saga de Antoine Doinel, que se había iniciado con Los 400 golpes y había continuado con Antoine et Colette. Filmada en unos de los meses más turbulentos de la historia reciente francesa, que incluyeron el despido de Henri Langlois de la Cinemateca o Mayo del 68, la película ha sido considerada por algunos críticos como una de las mejores comedias románticas de la historia del cine.
Presentación y coloquio con Jonás Trueba