Shūhei Hirayama es un viudo que vive una vida tranquila y rutinaria en Tokio, rodeado de sus tres hijos adultos: Koichi, su hijo mayor, ya casado; Kazuo, el menor, aún en la escuela; y su hija Michiko, que vive con él y se encarga del hogar. Aunque la familia mantiene una relación cordial, subyace una cierta tensión generacional y un velo de melancolía ante el paso del tiempo. A través de encuentros con antiguos compañeros de escuela y escenas cotidianas en bares, restaurantes y la oficina, Hirayama empieza a reflexionar sobre su vida y las decisiones que ha tomado. Uno de esos amigos, un maestro retirado apodado "el borracho", vive en condiciones precarias junto a su hija, quien no pudo casarse para cuidar de él. Esta situación deja una profunda impresión en Hirayama, quien comienza a ver paralelismos con su propia vida y el futuro de Michiko.
A nivel internacional, su reconocimiento ha sido más retrospectivo que inmediato. A lo largo de las décadas, El sabor del sake ha sido proyectada y celebrada en numerosos festivales de cine clásico y retrospectivas dedicadas a Ozu, siendo frecuentemente mencionada como una de las cumbres de su filmografía. En los Premios Kinema Junpo —otorgados por una de las revistas cinematográficas más prestigiosas de Japón— fue elegida como una de las mejores películas japonesas de 1962, lo que reflejaba ya el respeto que suscitaba la obra dentro del ámbito crítico.
Presenta Patxi Burillo