Sillas
de Bernat Aranda Onzain del Universidad Pontificia de Salamanca
por repensar los estereotipos de familia y por reflejar otras realidades posibles.
Namasté, Amigo
de Mario Selvi Salvador del I.E.S. Vega del Turia de Teruel
por apostar por nuevos referentes de la masculinidad.
de Almudena Castillero Soler de la escuela SchoolTraining de Málaga
por visibilizar los cuidados, hablar y aprovechar las segundas oportunidades.
Giro de tornas
de Laura Guobadia Aimufua del I.E.S. La Ería de Asturias
por la valentía de unas adolescentes al enfrentarse al sexismo.
El guedeyu Cenicienta
de Emma Pérez Velasco y Paula de Jesús Soto del I.E.S. Bernaldo de Quirós de Asturias
por la representación interseccional entre género y clase.
La mateixa sang
de Lucía Fernández de la Casa del I.E.S. Font de San Lluís de València
por la propuesta del lenguaje cinematográfico y por diseccionar las relaciones familiares.
Fragmentada
de Claudia Infantes Sánchez del I.E.S. Plaza de la Cruz de Navarra
por su honestidad en la propuesta y representar la aceptación familiar de otras realidades.